jueves, 24 de diciembre de 2009

Retrato de una Mujer

Tu mente y tú son nuestro Mar de los Sargazos,

Londres ha flotado en torno a ti durante estos

últimos años

y brillantes naves te han dejado esto o aquello

como tributo:

ideas, viejos chismes, pedazos de mil cosas,

extraños jirones de conocimiento y costosas

prendas desteñidas.

Grandes inteligencias te han buscado −a falta

de otra persona.

Has sido siempre postergada. ¿Trágico?

No. Has preferido esto a lo acostumbrado:

un hombre torpe, aburrido y hogareño,

una mente mediocre −con un pensamiento

menos cada año.


Oh, eres paciente. Te he visto sentada

por horas, ahí donde algo pudo haber surgido a flote.

Y ahora pagas a uno. Sí, generosamente pagas.

Eres una persona de cierto interés, uno viene a ti

y se lleva consigo una extraña ganancia:

trofeos pescados, alguna curiosa sugestión;


datos que no conducen a ninguna parte: una

o dos historias

preñadas de mandrágoras, o algo que podría ser de

utilidad y que sin embargo nunca utilizamos,

que no llena ningún hueco ni demuestra su uso,

ni encuentra su hora en el tejido de los días:

entre las deslustradas, llamativas, maravillosas

cosas viejas;

ídolos y ámbar y preciosas incrustaciones,

éstas son tus riquezas, tu gran almacén; y

sin embargo

para todo este mar acumulado de objetos inútiles,

extrañas maderas semihumedecidas, y cosas nuevas

y brillantes:

en el lento flotar de diferentes luces y profundidades,

¡no!, ¡no hay nada! En la suma de todas estas cosas,

no hay nada que sea enteramente tuyo.

Y sin embargo, esto eres tú.


Pfff, me costó trabajo!..pero he aquí, Portrait of a Woman de Pound, traducido por moi !!

domingo, 8 de noviembre de 2009

A las mujeres, por Don Juan Andrés de la Cruz

¡Mujeres necias! Que dudan
de todas nuestras intenciones
aun cuando mucho disfrutan
la compañía de los hombres.

¿Acaso no saben ustedes,
que su solo recuerdo
nubla y confunde la mente,
la vuelve del todo incoherente?

¿Que por ustedes vivimos
que por un efímero beso
todos nosotros morimos?

Son muy injustas mujeres
con el hombre sensible,
aquel que tanto las quiere.



Por si alguno de ustedes, gandules, lo llego a pensar. No, no existe Don Juan Andrés de la Cruz, sólo escribo esto para defenderme de Sor Juana y su "hombres necios".

Lacrimosa en Re menor

Me canso de hacer equipajes.
Si en vida no tiene sentido,
prepararse para hacer viajes
cuando no se llega al destino.
Me canso de estar ofreciendo
un no-moderno amor eterno.
Harto de amar y sentir en vano
de no poder ser el indicado.
¿Por quién suspiras,
mi amada y querida?
¿Por quién suspiras
que tus marrones pupilas
jamás en mi fijas
y si acaso me miras
es con mirada esquiva?
Por quién suspiras...
Ah, como si tu, corazón
tuvieras alguna duda
de quien es el competidor.
No quiero verte, tocarte,
ni ser el mismo de antes
no quiero más abrazarte,
quisiera mejor olvidarte.
Ya no me dejas dejarte
y en vano quiero esperarte
a que puedas amarme,
o me dejes olvidarte.
No quiero engañarme
jugando a aguantarme
que el otro te abrace.
Dejo ya de fingirme
que no puedo estar triste,
que no puedo sentirte
Pero no, no hay remedio,
por más que el dolor sea fuerte,
porque esto no lo controlo,
porque esto no sale de mi mente.

lunes, 12 de octubre de 2009

La muerte de la Verdad

"Dios ha muerto" Nietzsche
"La Ciencia clava los clavos en el ataúd de la verdad" digamos que es de Nietzsche, pero es mía.

El Maestro accedió a comer con sus amigos en un local cerca de Mixcoac a pesar de que no era tan de su agrado.
Pensó que para poder ganarse su respeto y admiración perpetuos debía de hablarles sobre la complicada concepción del mundo y el hombre expuesta por Nietzsche (además de que sentía curiosidad sobre cierta bebida mística, el tepache).
Se sentaron en una improvisada mesa (en realidad, era una maceta) frente a una estación de autobuses y ordenaron esos platillos típicos que tanto gustan a los de "su clase" como el los llamaba.

A la mitad de la comida iban, cuando el Maestro decidió oportuno comenzar su erudita disertación con un comentario casi casual, mientras con una pajita sorbía el tepache y pensaba que no estaba tan mal.

-Saben, estaba pensando. Creo que para frenar la crisis necesitamos un super-hombre que nos guíe, para tratar de descubrir racionalmente la verdad. Alguien que nos diga, ¿el tepache, realmente tiene alcohol?

Provocó risas y abucheos entre sus compañeros, pero ellos siguieron comiendo y albureándose, como buenos universitarios. Sólo el "Patotas" se quedó pensativo y se dirigió al Maestro.

-Ps no se we, ya ves que la razón no sirve pa'nada, siempre que algún wey se pone a pensar pasan cosas malas.

El Maestro se quedó estupefacto, ahí frente a el estaba un ciudadano medio que se atrevía a difamar el sagrado Raciocinio del que hacía gala todos los días.
Controlando su ira, se propuso dejar en ridículo a su compañero.

-Y dime, buen Patotas, ¿Por qué crees que la razón no sirve? ¿Acaso no necesitas de ella incluso para cruzar la calle? Si no razonaras, te dejarías atropellar por el tío ese que se pasó el alto o le pondrías tanta salsa a tus tacos, que te asfixiarías por tanto picante.

Sonrió satisfecho, creyendo haberlo vencido pues los demás se retorcían de la risa. Pero Patotas era demasiado simple como para dejarse vencer de esa manera tan esnob.

-Já, nel we. La razón no me ayuda a cruzar la calle, si yo me pusiera a pensar a la mitad de la avenida, el coche me manda derechito a conocer a mi pez difunto, y tampoco me pongo a calcular la cantidad de salsa que necesito pa'no morirme de un enchilón. Eso se sabe así...como si ya viniera de fábrica. Si ves que viene un coche, pues no cruzas a menos que estés bien wey. Y si te pasas de salsa en los tacos, pides otro tepache y ya.

Las carcajadas eran atronadoras, pues todo el local había escuchado la defensa del Patotas y se burlaban del pobre Maestro. Éste estaba tan indignado que se dedico a comer en silencio un buen rato. Mas el Maestro no pudo soportar su humillación y antes de pagar la cuenta y sorber el último trago de su tepache

-Nietzsche dijo que un super-hombre debía de surgir de entre las masas para que pudiéramos salir del hoyo en donde estamos. Debemos de inferir que esos super-hombres son aquellos que usan la razón, no pueden ser cualquier borrachín como el Canaca!

-Nel carnal, ahí si la regaste bien gacho. A ver, ese wey, el niche, me acuerdo de las clases de historia con la Hobbit. Según cuando Hitler leyó a ese wey, pensó que él era el super-hombre y que los alemanes eran acá los fregones. Y comenzó a matar judíos y a mucha gente. Entonces, ps yo no se we, pero no creo que hayan razonado como tu dices.

-Si, pero, la doctrina de Hitler interpretó de una man...

Pero el Compadre Patotas ya había agarrado vuelo, y no se dejaría amedentrar.

-Nel we, nel. Además ahí tienes el calentamiento global y el Nobel al Obama y todas esa madres, eso no es racional we. A ver, ya, no chille mejor échese otro tepachito que esta muy bueno, ¿que no?

El Maestro pagó su cuenta y tomó un taxi hasta su casa, cerca de la Facultad. Se puso una venda en los ojos (para protegerse del sol) (!) mientras pensaba. "Esos idiotas, creen que todo es tan sencillo, pero cuando la ciencia y la razón los alcancen, implorarán perdón por sus insolencias conmigo...pero, algo es cierto: ese tepache sabe bien".



El post esta dedicado al Día en que Colón echó por tierra la razonada suposición de que la Tierra es plana.
Además, celebro los 41 años que cumple el Tri, y si subo esto ahorita, es porque estaba aburrido.

domingo, 4 de octubre de 2009

Luna, Luna

A Tere:
Le agradezco que cumpla un año más en esta vida, le agradezco que sea mi fuente de inspiración, mi mejor amiga, mi mejor compañera, mi razón parcial de ser (en un 85%)...en resumen, le agradezco que sea mi Luna, y agradezco que El Lado Oscuro de Mi Luna, sea tan luminoso y hermoso como el lado visible.
Le agradezco que Sea, y la quiero por Ser.


Busque desde siempre una Luna,
entre las más diversas personas.
Mas claro, no hallé fortuna
sino sólo abundaron desgracias.

No me di cuenta que bastaba mirar
a quien estaba siempre a mi lado.
Hasta que algo me hizo voltear
y entonces me quedé prendado.

No intenté resistirme a lo que siento
ni filosofar vanamente sobre ello.
Ni usar la razón para entenderlo.

Sólo seguí queriendo con locura,
sin esperar ser correspondido.
Había descubierto a mi Luna.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Suicídese

"...Me encontré perdido en mi estudio, con una botella de whiskey en la mano. Una insistente voz resonaba en la habitación pero no, todavía no, todavía el delirium no se había adueñado de mi.

Serénate Guido -me dije- por más atormentador que sea la voz estás seguro..."


-¡Basura! ¿Quién se cree el Guido ese? ¿Qué clase de idiota cree que Es? ¿Eh? ¿Cómo se atreve a tratar de tranquilizarme asumiendo mi personalidad?-dijo encolerizado después de releer el inicio de su nueva novela.

-Jim, como mi editor debiste de habérmelo hecho notar. ¡Usar a ese tal Guido fue la mayor estupidez que he escrito! y eso ya dice mucho.


-¡Tú mismo dijiste que no debía de cambiar ni una sola coma en tu novela!


-No hablas en serio Jim, ¿o si?. ¿Acaso no viste que es casi una copia de un párrafo de Viewegh?Eres editor, ¡maldita sea!, ¿no es ese tu trabajo?


Salió del despacho del editor antes de que a Jim le diera tiempo de reaccionar y con paso vivo se dirigió a la cafetería del edificio.


Con una sonrisa radiante se sentó en su mesa favorita y comenzó a leer el periódico, esperando a que tomaran su orden.


Nada le divertía más que leer las noticias de un mundo que consideraba vano y estúpido.

-Hum "...desfile militar en la Plaza de la Constitución" pobres diablos..."Barça empata a ceros con el Inter..." Haha, 50 billetes..."Lula dice que la crisis la provocan los ricos..." ¡bien por ti!

-¿Qué tal Henri, lo de siempre?

-Ahm, no chica, hoy sólo quiero cenar, haha. Hola Cindy, sólo tostadas y café por favor.

-Haha, de acuerdo. Escuché que volviste a zarandear al Jefe.

-Sólo le recordé que aunque el me pague, soy yo el que es famoso y el que lo invita a jugar póker los jueves.

-Uno de estos días te va a despedir.

-Y uno de estos días me vas a dormir, ahora, dile a Doris que las tostadas no tan doradas por favor.



Alejóse la mesera con una sonrisa de desdén en el rostro, dejando al Autor absorto en su lectura y entro en la cocina.

Estaba leyendo las últimas páginas y encontró un curioso anuncio que saltaba a la vista, por el tipo de letra tan elegante.


"Suicídese"


-Es el anuncio, artículo y noticia más interesante de todo el periódico-murmuró en voz baja-y el más acertado además.

-Su café señor Henri.


Recortó el pequeño anuncio y al terminar su cena, salió de la cafetería después de bromear al estilo de Groucho Marx con la mesera (¿pagar la cuenta? ¡qué costumbre tan ridícula!) y se dirigió a su casa, a dos calles de la editorial.


Comenzó a reflexionar sobre la impertinente frasecita una vez sentado en su escritorio preguntándose a quién se le habría ocurrido publicarlo.


¿Quién puso ese anuncio?


-Pudo ser cualquiera, pero no es eso lo importante, ¿Te sirve de algo que el autor sea un desquiciado y frustrado burócrata? ¿o el jefe de suicidios.com? No.

Estás cayendo en una falacia, no tienes que pensar en el Quién, sino en el por qué. Vale, formula la pregunta otra vez.


¿Porqué Suicidarse?


Reflexionó la mayor parte la noche, pensó en la decadencia de Nietzsche y en la teoría del pesimismo de Schopenhauer; en las tragedias del mundo y en la indiferencia de la sociedad; en que el mundo esta enfermo y en su fama de escritor; en la estupidez de las masas y en la emancipación proletaria... pero no pudo contestar a la pregunta. Ninguna respuesta lo podía satisfacer.


-Ingenuo de mi, no es esa la pregunta a la que debo de responder, Los Maestros de la Duda ya respondieron a ella. Reformulala una vez más:


¿Porqué no Suicidarse?


Tampoco ahora pudo encontrar La respuesta. Intentó encontrar una sola razón para no bajarse del tren. Y no halló ninguna.


Fue entonces cuando vio La Luna.


Y se olvido de la pregunta.

Vio la Luna y dejó que su resplandor lo iluminara, se dejó fascinar por su misterio y por su belleza. Al verla se sintió vacío, como Cortázar cuando negaron a Silvia. Sintió que detrás de la Luna, no había nada más para el.

Y se sintió libre, porque entonces el podría hacer que hubiera algo más, porque representaba el Ideal de la Libertad, el gran vacío que nos sostiene, el gran vacío sobre el que construimos nuestra vida. El Gran vacío de la existencia.

Sartre y Camus.

El Gran Vacío es la Libertad, y a la libertad hay que temerle.

Fue en ese momento cuando comprendió.



-El anuncio no dice Suicídese. El anuncio dice "libérese de ser libre". Vivir es ser libre, vivir es condicionarse, vivir es estar sobre ese vacío que nos permite usar la razón y el libre albedrío.

Vivir es libertad, libertad es el vacío. La vida es vacío y tu ¡Oh Luna! representas ese vacío.

Por ti mi Luna, por ti he de ser libre de la libertad. Ser Libre de Verdad.



"Tras una semana del suicidio del escritor Henri, su casa editorial ha anunciado una edición de sus obras completas en 2 volúmenes, además de la presentación póstuma de su última novela 'Primavera en Barçelona'"*



"La policía ha confirmado suicidio del escritor Henri a pesar de no haberse confirmado el motivo"*



"El día de ayer publicamos la última palabra del concurso 'Anote las Palabras' para ganar una suscripción a nuestra revista por un año, si usted mandó todas las palabras publicadas antes de las 20.00hrs del día de ayer, manténgase alerta, pues anunciaremos a los ganadores esta noche.

Le recordamos que las palabras correctas fueron: 'lectura, felicidad, confusión, escritor, suicídese e ironía'

Agradecemos su participación"*



*Algunos artículos del periódico Le Monde.







domingo, 16 de agosto de 2009

Helena

Recluido ahora en el Psiquiatrico, teniendo que soportar la compañía de los orates y de los incompetentes enfermeros, me da por recordar el génesis de mis desgracias.
Miento, bien se yo que el origen de mis desgracias radica en mi personalidad y no en un hecho o persona concreta.
Pero soy un viejo arrogante y casi senil, tengo derecho a mirar atrás y creerme inocente.
Canta, ¡Oh Musa!, la cólera del Silvano Neofausto pronunciando el nombre mil veces llorado de su amada:

Helena, Helena.
Era inevitable no prenderse de ella, su personalidad era atrayente, de cólera viva y rápida risa (aunque sólo riera con ganas de los chistes de algún escritor inglés poco conocido).


Al igual que Belbo quedó fascinado con Il Pendolo, yo quedé otro tanto con ella, pues en ese entonces yo era un idealista, dispuesto a combatir la maldad humana, a compartir emociones, a dejarme llevar por la poesía y la literatura romántica.

Supongo que fue mi fama de abraza-árboles y de liberal lo que la hizo interesarse en alguien como yo, además de mis malos poemas publicados en el boletín de la facultad (Si, hasta ese extremo llegaba mi sentimentalismo).

Huelga decir que la atracción fue mutua, yo buscaba una Musa y ella a un buen orador para su campaña política en la facultad. (¿intereses opuestos?)


Fue una época bastante feliz, su facultad estaba junto a la mía y teníamos suficiente tiempo para encontrarnos varias veces al día y divertirnos como se supone que se deben de divertir los jóvenes a esa edad.

Las reuniones con los comités de huelga, los sindicatos, los porros, los inadaptados que soñaban con revivir a Lennon para dispararle de nuevo, todo era parte de nuestro diario vivir.
No negaré que me sentí como Dante al encontrarse en el 1º círculo del Infierno, no estaba rodeado de Aristóteles ni de Platón, pero si de tipos que clamaban por Jodorowsky, por Osho y por Castaneda.
Uno podía oler el aroma de los habanos preferidos de Fidel, ver los estandartes con el Che, saborear al vino de la cosecha francesa del 68, sentir un ambiente de Revolución.

Aunque sentimental, siempre mantenía mi cabeza en la tierra y, aunque participaba activamente con el grupo, tenía bastante claro que la Revolución jamás llegaría puesto, que no había razones suficientes para levantarnos en contra de algún enemigo.
Me extrañaba que Helena gustara de esas reuniones. En mi caso era comprensible, pues estudiaba Filosofía, pero era ella una burguesa conservadora siempre apegada al Estado de derecho. Supuse que necesitaba ganar votos y trabar amistad con los "bárbaros" para que no le causaran problemas si es que conseguía un puesto en el consejo de la facultad.
Creo que es bastante sencillo, en términos clínicos, adivinar la personalidad de Helena:
Trastorno Obsesivo Compulsivo Narcisista

Ese fue el gran problema con el que tuvimos que lidiar, yo no era precisamente alguien sumiso y a ella le encantaba ser considerada la mejor hasta en el deporte universitario de "levanta-tarros"

Peleábamos, no por quien llamaba a quien, o quien colgaba primero, o quien no llegaba a tiempo a las citas. Peleábamos por quien tenía la ideología más políticamente correcta, por quien era el mejor dialético/retórico y por quien podía hacer el ensayo más manipulador.

Este choque de gigantescos Egos nos llevó a una situación insostenible, llegó ella incluso a insinuar que no quería estar con alguien que tuviera la "mente tan cerrada" como para no aceptar las opiniones de los demás.
En mi descargo puedo decir que su opinión era "Yo soy la mejor alumna de toda la facultad y no puedes demostrarme lo contrario"

Así se lo dije y recibí una de sus extraordinariamente poderosas bofetadas.

Manipuladora por naturaleza, no tardo en tratar de reparar el daño introduciendo en sus disculpas la sugerencia de que me lo había merecido.
Y mi gran fallo, mi gran error, que me costó la renuncia a la sensibilidad emotiva, no fue el llamarla bruja arrogante y megalómana (por decirlo dulcemente), sino el confundirme y firmar la solicitud de candidatura al Consejo de la Facultad (folio hA1H1) creyendo que estaba firmando una simple relación de firmas de los que íbamos a votar (folio AH1A1).
Eso la puso cual si hubiera asesinado a su mascota preferida, o peor aún, como se me hubiera ocurrido ofrecerle ayuda en una tarea.
En vano intenté calmarla, en vano le recordé que no me apetecían los cargos políticos, ni mucho menos ser el pelele de la facultad.
Desde luego, eso la enojó aún mas. Supongo que fue ese el pretexto para que se fuera al bar "de al lado" a dejarse invitar unas copas por cualquier desgraciado que estuviera ahí.
Me enteré de que encontró consuelo en brazos de un tal "Alberto" (tergiverso aquí su nombre o me demanda el muy pusilánime) un estudiante de la facultad de Derecho y que había estudiado con nosotros en la preparatoria y que era una brillante mediocridad, tan sumiso y lame botas que un cortesano de Luis XVI parecería un noble rebelde a su lado.
Lo sé, lo sé, mi opinión es subjetiva y está inspirada en un suceso desagradable, pero el tipo simplemente no me caía. Ejemplo:
Alberto-Y dime amigo, ¿qué estudiarás ehh?
Yo-Oh, estudiaré Filosofía y Letras Modernas.
Alberto(mirándome como si fuera un crustáceo)-Ahh, si...a mi me gustan mucho los libros y la filosofía también, es muy bonita.

(Confieso que ya desde ese entonces era un brutal cínico que no soportaba ese tipo de idioteces, así que me hizo perder el control)

Yo-¿Bonita?, mi amigo, bonita están tu hermana y tu prima, la filosofía no es bonita..¡es Necesaria, grandísimo ignorante!
Ese día nos peleamos y enemistamos mutuamente.

Ahora comprenderán mi turbación al saber que mi "compañera de vida" me había cambiado por un tipo de tal calaña.


Mi última conversación con Helena fue relativamente tranquila, al menos no terminé en el hospital.
Nos encontramos en "nuestro" bar y entablamos una charla medianamente decente:

Helena-Sabes, quiero que sea una separación normal, sin dramas ni nada por el estilo, sin ninguna de las zancadillas habituales.


(Yo no tenía idea de cuales eran las "zancadillas habituales pero me callé)

Yo-Entonces, ¿me dejarás por un error que cometí al firmar una hoja que no era y te irás con un tipo que tiene la mitad de mi sentido del humor y el doble de estupidez?
Helena (mirándome con odio)-Alberto es magnífico, es comprensivo, atento, divertido, cortés, abierto...
Yo-Sí si, y también es medio calvo y no sabe tener opiniones propias.
Helena-Bien, tu jamás me has tomado en serio, así que no me extraña tu actitud hacia mis decisiones. Si quieres decir algo es mejor que lo digas ahora porque me está esperando.

Tal vez sea el miedo que le tengo a los tacones excesivamente altos de las mujeres superficiales o a que nunca he podido discutir con una mujer de esa manera, pero me quedé callado mirándola.
El círculo se estaba cerrando (y bien sabía que yo no estaba precisamente dentro de el).

Helena-Okay, te dejo, no vales la pena.

El círculo se cerró
Me di cuenta ese día de que buscar consuelo en los sentimientos era un gran error, pues son viscerales, engañosos, crueles y decidí que lo único que me iluminaría de ahora en adelante sería solamente la razón.


No volví a hablar con Helena, aunque desde luego la seguía viendo mucho por la facultad siempre recolectando votos, repartiendo promesas e inoportunando gente.
Huelga decir que no ganó las elecciones, y me culpó a mi de ello, alegando de que le mandaba Mala vibra y feos pensamientos.


Ahora que lo recuerdo, me doy cuenta de que a veces un tipo 2 cm más alto y con mucho menos cabello puede ganarte a la mujer de tus sueños sólo porque está de acuerdo en lo que ella piensa y dice.

No es ese mi caso y aunque el círculo estuvo y sigue estando cerrado, Helena seguirá en mi mente, pues aunque desprovisto de todo sentimiento, tengo el don de la memoria y tengo la capacidad de ver hacia atrás sin arrepentirme y sin lamentarme de lo que nos hicimos.

Termina la clase, señores.